Los medios de comunicación, aunque en un momento determinado informaron tibia y parcialmente de los hechos cuando no tuvieron mas remedio , los deformaron descaradamente, y nunca hicieron públicas las imágenes de lo sucedido, a pesar de la numerosa presencia de periodistas y cámaras de tv en la mayoría de los acontecimientos. Solo existen vídeos grabados por personas anónimas presentes en los diferentes escenarios, algunos de los cuales están en el canal youtube. Por ello, las imágenes de los videos que se adjuntan no son de buena calidad, pero sirven perfectamente para ilustrar la película de los hechos y de paso, dejar en evidencia la nula ética deontológica de la mayoría de los periodistas cuando de determinados temas se trata.
Por supuesto, como viene sucediendo hasta hoy con cualquier acto que cuestione la Monarquía, y a pesar de la magnitud del acontecimiento, ningún medio de comunicación de ámbito estatal se hace eco del evento, ni antes, ni durante, ni después, circunstancia esta que, paradogicamente, va a incrementar el empuje del movimiento republicano, cuyo objetivo desde ese momento, una vez alcanzado un grado creciente de auge y relevancia social, va a consistir en por tratar de superar el tremendo ostracismo mediático que lo mantiene semi-oculto.
16 de mayo de 2006. Nueva detención de jóvenes republicanos.
Foto perteneciente al reportaje de El Mundo del 18 de Mayo de 2006, con los detenidos Naiara y Eduardo.
19 de Mayo de 2006. Los republicanos se organizan. Los acontecimientos se precipitan desde este momento. La repercusión de la detención de los jóvenes indigna a los republicanos, que se intercambian impresiones en Internet buscando una respuesta a tal abuso de autoridad. Casualmente, al dia siguiente de la publicación de la noticia, hay programada desde meses atrás, como un acto republicano más de aquel momento, una "Verbena Republicana" en el campus de la Universidad Complutense de Madrid, conmemorando el 75 aniversario de la proclamación de la II República, en la que se dan cita gran número de simpatizantes republicanos, entre ellos los jóvenes detenidos Naiara y Eduardo. Flota en el ambiente la indignación por lo ocurrido. Eduardo va a subir al estrado y va a decir unas palabras, mencionando el asunto, en mitad de las palabras del resto de congregados. De esta manera, el asunto de las detenciones es objeto de debate público en el momento oportuno.
Logicamente, aquella verbena se presenta como la ocasión propicia para dinamizar el movimiento republicano, y se comienza a gestar una protesta por las detenciones y supuestas agresiones a Naiara y Eduardo, y que mejor ocasión para llevarla a cabo que durante la segunda etapa de la gira de los príncipes, con muchos medios de comunicación presentes, y que estaba programada para tres dias después, ésta vez en Fuenlabrada.
22 de Mayo de 2006. Se rompe el cerco definitivamente: los acontecimientos de Fuenlabrada.
Los acontecimientos se precipitan otra vez. Los príncipes continúan con el presumible baño de masas programado, esta vez toca Fuenlabrada, pero algo ha ocurrido desde la "apoteósica" visita a Móstoles: una parte nada desdeñable de la opinión pública conoce la detención de los jóvenes ocurrida una semana antes en dicha localidad, y los republicanos están indignados, pero también movilizados y crecidos. Además, existe cierto nerviosismo y preocupación por parte de las autoridades, y la convicción (tanto entre las fuerzas de seguridad, como en la Casa Real, como entre los mismos republicanos) de que una nueva detención de republicanos gozaría de una gran repercusión y supondría un descrédito para la Casa Real, algo por lo que ésta no está dispuesta a pasar. Por lo tanto, previsiblemente no iban a producirse detenciones ni actuaciones policiales preventivas, por lo que los republicanos, por una vez, van a poder acercarse al lugar donde están los príncipes, en igualdad de condiciones con el resto de los ciudadanos. En los dias previos, los foros de Internet alternativos bullen con el asunto y el 22 de Mayo, hacia las 8 de la tarde, en la inauguración de un Centro Social por parte de los príncipes, ante la presencia éstos, de toda la Corporación Local, de la Presidenta de la Comunidad de Madrid, y de decenas de medios de comunicación, va a ocurrir algo inaudito: los republicanos acaparan el acto (fijense especialmente en todo lo que ocurre a partir del 1': 40" del siguiente video):
En el video se puede observar como los republicanos están actuando libremente, como el resto de los ciudadanos allí congregados, algo inaudito en España hasta ese dia. Sin duda, temiendo las reacciones de la prensa si se volvía a detener a ciudadanos por opinar distinto, desde las altas instancias se había dado la orden de no desalojarles antes ni intervenir durante el acto, como había sucedido tantas veces anteriores. Cuando los príncipes y todo su séquito salen del edificio hacia la explanada, los cánticos republicanos son atronadores, pues toda la comitiva pasa a escasos 10 metros de los manifestantes. En ese momento, el príncipe cambia ligeramente de dirección, gira hacia la izquierda, y se encamina a saludar a las personas que están justo en el lado donde se amontonan los republicanos, quizá en un acto de complaciencia ante una situación completamente nueva, o seguramente para aparentar "respeto" y "tolerancia" ante los anti-monárquicos y no dar la sensación de que los esquiva. Durante varios minutos, toda la comitiva y autoridades, detrás de los príncipes y a 3 metros de los republicanos, asisten atónitos e impertérritos al insólito espectáculo de ver como los herederos tratan de dar la mano a los asistentes mientras son literalmente "engullidos" por gritos de "vivas a la República" y banderas tricolores, aunque en ningún medio se publicaron las espectaculares imágenes de video. De todos modos, dada la masiva presencia de medios, la magnitud de la protesta, y la trascendencia de un hecho sin precedentes como este (y ocurrido en la capital del reino, para mas inri), los medios de comunicación mayoritarios esta vez si se hicieron eco de la protesta republicana en los telediarios, las radios y la prensa, aunque nunca sacaron las espectaculares imágenes que salen en el video que adjunto. No obstante, Telemadrid, que retransmitía en directo la visita, desconectó la señal durante el desarrollo de la protesta. Por primera vez en 30 años, el republicanismo era noticia. La protesta se desarrolló sin ningún tipo de incidente ni de conducta violenta, ni siquiera verbal. Para los manifestantes, su actuación era tan respetable como la de los seguidores de los príncipes ya que, según declararon, en un Estado de Derecho si los príncipes salen a la calle a saludar al pueblo, este pueblo tiene derecho a aclamarlos, a ignorarlos, o a mostrar su rechazo.
2 de Junio de 2006. Mas protestas en Alcalá de Henares.
La difusión y repercusión de las protestas y la actividad por Internet provocan un "efecto bola de nieve", que se va a manifestar en la siguiente etapa del tour de los príncipes, en Alcalá de Henares, donde arrecian las protestas republicanas, sin temor a represalias, como se puede observar en el siguiente video (no hay que perderse la parte final del video, es impagable).
Como sucediera la semana anterior tras la visita a Fuenlabrada, los medios de comunicación volvieron a hacerse eco de la numerosa presencia de banderas republicanas durante la visita de los príncipes a Alcalá de Henares. Asímismo, tampoco se registró ningún tipo de incidente, agresión verbal o conducta incívica por parte de los manifestantes.
13 de Junio 2006. Leganés, el peor dia de la Monarquía.
Fué el 13 de Junio de 2006 el peor día para la Monarquía en mucho tiempo. La última etapa del particular "via crucis republicano" en el que se había convertido el "tour" de los príncipes, Leganés, va a significar el punto culminante de todo el movimiento republicano. Si en Móstoles fueron 5 o 6, y en Fuenlabrada y Alcalá mas o menos un centenar, en Leganés se van a congregar unos 300 republicanos. Las fotografías de prensa con los príncipes rodeados de republicanos en Fuenlabrada y Alcalá, amenazaban con ser un chiste comparado con lo que ocurriría en Leganés si tantas personas conseguían acercarse a los príncipes. Además, Telemadrid venía siguiendo en directo toda la visita ese día, con lo que la repercusión podría ser apoteósica.
Los republicanos llegaron a las inmediaciones del Centro Ciudad de los Muchachos, donde estaban los príncipes, a primera hora de la tarde, siendo ya entonces mayoría frente a los congregados "monárquicos". A la salida, y viendo lo que estaba ocurriendo, los príncipes se ven obligados a salir en coche blindado del centro por la puerta de atrás. Y no sólo eso, sino que rectifican el recorrido a pié que tenían previsto desde el citado centro hasta el restaurante “El Cebadero”, donde tenían la siguiente cita. Evidentemente, darse un baño de masas.... republicanas, no estaba en sus planes. No obstante, inasequibles al desaliento, los republicanos (que según avanzan los minutos son cada vez mas), acuden a pié a las inmediaciones del restaurante. Viendo lo que se les viene encima, los responsables del evento regio deciden montar un dispositivo policial especial con el objetivo de minimizar todo lo posible la insólita situación que está sucediendo: que los príncipes se están encontrando muchos mas republicanos que seguidores. Solución: alejarles mediante un numeroso cordón policial para que no estropeen mas el recorrido "triunfal" de sus altezas.
En el siguiente video se puede ver perfectamente el estrepitoso fracaso del evento, pues los príncipes no congregaron a casi nadie en Leganés: sin embargo, cientos de republicanos son mantenidos, mediante un numeroso cordón policial, a 30 metros del restaurante donde están los príncipes. El objetivo es que los periodistas y cámaras allí reunidos no sacasen de nuevo la patética imagen de los príncipes siendo abucheados, aún así, esos periodistas hicieron numerosas fotos y grabaciones de los republicanos que "misteriosamente" no salieron a la luz nunca. Lo que sí salió en los informativos fueron ciertas tomas cortas escogidas, donde aparecían los seguidores de los príncipes,con las banderitas, pero en las que no se podía intuir que solo eran unas pocas decenas, sin sonido ambiente sino en off, pues no era plan que se escuchase el atronador escándalo de los republicanos a 30 metros de allí. Por supuesto, esos informativos, al igual que la totalidad de los periódicos y radios, titularon la visita como "nuevo fervor popular de apoyo a los príncipes" y ocultaron de forma total las protestas republicanas...... sin comentarios.
La salida de los príncipes va a ser más de lo mismo, se les deja acercarse al jardín del restaurante a los escasos "seguidores" que les esperan, se les da una banderita y los príncipes se limitan a saludarles en el patio unos segundos, permaneciendo los republicanos retenidos a unos 30 metros de allí, al otro lado de la calzada, aunque sus gritos contra la Monarquía se oían a gran distancia. Rapidamente, los organizadores guian, cual monigotes de "quita y pon" o extras de una película a los mismos seguidores de los príncipes, en su mayoría jubilados, que había en el jardín (no mas de 60-80) hasta la calle, en la acera anexa al recinto, situándoles justo enfrente de los republicanos, para que saluden al coche de los príncipes, que sale por la puerta de atrás a toda velocidad, y la visita tenga su foto oficial de rigor, libre de tricolores. Ante el inasumible espectaculo de retransmitir como a los principes les siguen el triple de republicanos que monárquicos después de la machacona campaña monárquica de propaganda previa a la visita, “Madrid Directo”, programa de Telemadrid que, una vez mas iba a emitir toda la visita, deja de emitir la señal en directo en varias ocasiones a lo largo de esa tarde, una vez mas, concretamente cada vez que los príncipes entran o salen de un edificio, para poner en esos minutos reportajes en diferido sobre la vida y obra de sus altezas.
Observen entero y atentamente el siguiente video, donde se aprecia el "destierro" de los republicanos fuera de la toma de TV, el cordón policial, el revuelo y agitación de banderitas en el patio del restaurante cuando salen los príncipes, el traslado a la acera de los mismos "extras" que estaban dentro, y la escapada fulminante de sus altezas a toda velocidad en lugar del habitual baño de multitudes.
Estos hechos de Leganés constituyeron todo un éxito del movimiento republicano, ya que, sin ningún tipo de acto violento o incívico, y ejerciendo el legítimo derecho de libre circulación y de expresión como cualquier ciudadano, incluídos los que acudían a la via pública a aclamar a los príncipes, consiguió cambiar la agenda de éstos durante parte de su visita en la citada localidad. Y hay que decir que esa agenda fué modificada con la única finalidad de que la mayoritaria presencia de republicanos no empañase el objetivo de esa gira, que no era otro que promocionar al futuro heredero a la corona.
Y para la Corona, la "gira" que iba a servir para promocionar a los príncipes, fué un fracaso cada vez mayor según iba desarrollándose, con el colofón del desastre in paliativos de Leganés. Pero los medios de comunicación iban a convertir ese fracaso en un éxito. Tras los acontecimientos de Leganés, algo cambió la dinámica de cierta libertad de información iniciada con la publicación de la detención de Móstoles. Pese a que los medios habían informado de los hechos de Fuenlabrada y Alcalá, misteriosamente, al dia siguiente de la visita a Leganés, ningún medio dijo absolutamente nada de lo que había pasado allí, ni una sola linea, o foto. Sencillamente "no había ocurrido", sin embargo, de manera unánime tildaron la visita como de "nueva muestra de fervor a los príncipes". Es decir, solo se enteraron del fracaso los vecinos de Leganés, el resto de España no.
De repente se había decidido parar en seco la breve experiencia de libertad de información respecto a la Monarquía, durante la cual quedó demostrada la fragilidad de la Institución en cuanto se abre un poco la censura en torno a ella. Cualquier periodista de España sabe que si la Casa Real llama a la Dirección de un medio de comunicación se hace lo que diga la Casa Real, como viene ocurriendo desde hace mas de 30 años. Sin duda, aquella primavera de 2006, la Casa Real vió como se abría una brecha en su total control informativo, y como la experiencia se le había ido de las manos y amenazaba con seguir extendiéndose, cortó de raiz aquella breve, aunque intensa, "Fiebre Republicana", como fué catalogada por diversos medios de comunicación durante el mes escaso que duró una mínima libertad informativa respecto a la Monarquía.